Publicado el martes 23 de junio de 2015
Ahmed Mansur fue detenido en Berlín por la policía alemana cuando viajaba para entrevistar a un especialista en el conflicto árabe. El cronista estaba acusado de torturar a un abogado y tenía un pedido de captura de Interpol. Según denunció en su momento el comunicador, la acusación era parte de una fabricación del gobierno que había catalogado a su agencia, Al JAzeera, como un agente político internacional.
Desde Egipto rechazaron dicha explicación y solicitaron la extradición del hombre que recientemente puso frente a las cámaras a Abu Muhammad Al Julani, líder de la rama siria de Al Qaeda. Mostafa Suang, director general de la agencia de noticias pidió “por la libertad de Prensa” mientras que Reporteros sin Fronteras acusó a Berlín de ser “Complice del régimen autoritario en Egipto”.
Hasta el momento no hubo ningún dictamen oficial, y se esperaba que en las próximas horas se definiera la suerte de Mansur.