Publicado el martes 7 de abril de 2015
Es lo que ha decidido, por ejemplo, la cadena estadounidense de electrónica de consumo RadioShack. La compañía está en bancarrota y está liquidando todos sus bienes, tanto sus bienes físicos como intelectuales.
RadioShack lo ha puesto todo a la venta, sus tiendas, sus marcas registradas, sus dominios, su plataforma de correo electrónico… y también los datos personales de sus clientes.
A través de la empresa Hilco Streambank, RadioShack ha puesto a la venta, entre otros “jugosos” paquetes de datos, 13 millones de correos electrónicos de usuarios y 65 millones de nombres de clientes y direcciones físicas.