Publicado el martes 19 de septiembre de 2017
Una embarcación experimental lleva meses esquivando naves grandes y buques de carga en el puerto de Boston. Cuenta con sensores y software que le permiten manejarse sola, y en su casco de aluminio tiene escritas las palabras “nave sin tripulación”
“Tenemos naves totalmente autónomas”, afirmo Jeff Gawrays, técnico de la startup de Boston Sea Marine Robotics.
Por otro lado, Johnson, un ingeniero que trabajo en el rescate del Costa Concordia, un barco que se hundió frente a las costas de Italia en el 2012, dice que ese y otros desastres lo convencieron de que la industria marítima tiene una gran dependencia de la tecnología del viejo mundo. Y agregó: “los humanos se distraen, se cansan, pero las maquinas no”