Publicado el jueves 6 de octubre de 2016
Juan nació el 17 de abril de 1984 en el Hospital Alemán de Buenos Aires. Al poco tiempo, la relación con Peteco se cortó, Ursula dejó el país con su hijo, rumbo a otro destino diplomático. Por años, el autor de La estrella azul escribía cartas que nunca llegaban. Hasta que -según se cuenta- con ayuda de Mercedes Sosa pudo dar con Juan en Nairobi, Kenia: el niño fue con dos guardias y Peteco le regaló un bombo legüero y una camiseta de Boca.
Su hijo no hablaba castellano entonces y no logró demasiado. Hasta que en 2015 hubo un primer efímero encuentro en Viena: un día antes de que Peteco se volviera al país. “Al principio, Juan no me quería atender, pero al final nos vimos con él y la madre por dos horas”, cuenta. Ahora “a gatas es la segunda vez que lo veo de grande. Ya hubo una primera conversación para charlar sobre nuestra historia”.
Horas después del encuentro, el miércoles a las 7.48, Peteco Carabajal publicó la foto sacada en el bar: Peteco y Homero se abrazan con Juan Antonio Carabajal, alto y de pelo lacio castaño claro (Trabaja en la ONU; Organización de las Naciones Unidas). Los tres con plenas risas, lejos de toda solemnidad para ellos y toda la familia Carabajal.