Publicado el lunes 19 de octubre de 2015
En su denuncia, presentada a principios de 2014, la universidad aclara que esas tecnologías estaban integradas "de manera no autorizada" al procesador del iPhone 5S, iPad Air y iPad Mini con pantalla Retina, a la venta desde el año anterior.
El proceso judicial continuará ahora para intentar determinar los daños sufridos por la casa de estudios y, por lo tanto, la indemnización que Apple deberá pagar. La demanda era por USD 860 millones.
Según la agencia de noticias Reuters, el juez instructor de la causa, William Conley, sugirió que la cifra podría ser aún mayor si se determina que Apple infringió de manera deliberada la patente.